La pérdida de su “gran amor” es un temor recurrente en Chayanne. El artista, para quien “no hay imposibles”, suele enfocar en lo positivo, pero no elude la posibilidad de un desencanto.
En la disolución del idilio que mantiene con su fanaticada desde hace 32 años, nace uno de los mayores miedos del cantante, quien asegura vivir para complacer en simbiosis a aquellos que lo energizan con su aplauso.
“El temor siempre está. Trato de no pensar en eso, pero que el público no quede contento, el perder ese gran amor me asusta”, confesó el intérprete de “Si no estás”, quien celebrará el Día de San Valentín entre Puerto Rico y Miami.
El canceriano de 42 años y casado con Marilisa Marronesse desde hace cerca de 15 años, con quien procreó a Lorenzo e Isadora, de 13 y 10 años, respectivamente, descarta aumentar su prole. “Me quedo con dos (hijos)”, adelantó. Lo que continuará alimentando, irrespectivo a lo que pronostiquen los astrólogos –que vaticinan un año tormentoso en su matrimonio– es su relación de pareja.
“Hay que echarle abono y tratar de echarle agua al jardín para que las flores no se marchiten. Pueden decir muchas cosas, pero uno lucha para que las cosas vayan bien”, ripostó quien suele leer su horóscopo, pero “cojo lo positivo y tratas de hacer las cosas correctamente para que salgan bien”.
Consciente de lo infalible de su sonrisa, Chayanne se canta sin remordimientos, sin espinitas profesionales, personales y más partidario que enemigo del cambio.
“No soy reacio al cambio. Dentro de mi música, que es pop, me da la oportunidad de hacer fusiones con otros ritmos y en el escenario mi estilo es de riesgo porque tengo un gran esfuerzo físico”, insistió Chayanne, que augura que su nuevo disco será “distinto” dentro de su esencia.
“Cada vez que tomas una decisión hay un riesgo envuelto. El riesgo viene cuando aceptas y dices voy a remar en esa dirección, porque no hay marcha atrás”, comentó.
Si pudiese viajar en el tiempo, re visitaría su niñez. “Esas salidas a la represa, al Yunque con mis padres y ahora lo hago yo (con mis hijos) en las cuevas de Camuy. Añoro a mis abuelos, a los dos, por parte de madre y padre. Viví cosas tan bonitas…esas jugadas de dominó que me enseñó mi padre y mi abuelo”.
La familiaridad es un elemento intrínseco en la figura del llamado “torero boricua”. Flanqueado por sus hermanos Elliot y Emanoel –aspirante a la alcaldía de San Lorenzo por el Partido Nuevo Progresista– el artista hace extensivo esa fraternidad a sus seguidores.
“Vengo con toda esa emoción, no presión; sí nerviosismo”, adelantó sobre lo que provoca sus compromisos de este viernes, sábado y domingo en el Coliseo José Miguel Agrelot como parte de la gira “No hay imposibles”. Será la primera vez que se presenta con su show completo en ese plató.
Es donde nací, donde está mi familia, mis vecinos, mi gente. Son tres generaciones que muchas veces van a verte”. Elmer Figueroa, su nombre de pila, quien arribó ayer a la Isla, adelantó para su cita boricua “se suma más. El escenario es más grande, se buscan más luces, más efectos especiales”.
En términos de contenido, habrá “un homenaje a la música de Puerto Rico”, sin echar a un lado los temas de su más reciente álbum y sus éxitos emblemáticos como “Completamente enamorados”, “Dejaría todo”, “Tu pirata soy yo” y “Provócame”, entre otros.
En el enfoque de su propuesta radica precisamente lo que considera su mayor aportación a la música Pop. “No que otros no lo hayan hecho y lo seguirán haciendo, pero cantarle al amor, al positivismo. No hay imposibles”.
En el marco del mensaje que daría el gobernador Luis Fortuño ayer, el cantante expresó cuál es su mayor preocupación. “La educación es el futuro de Puerto Rico y siempre voy a inclinarme por los niños”.
Chayanne, quien acaba de visitar México por segunda ocasión con su gira y realizó seis fechas en el Auditorio Nacional de la capital azteca, tiene en agenda una tercera parada. El festival de Viña del Mar en Chile, República Dominicana, Aruba y Colombia, entre otros, también están en la agenda de conciertos que se extenderá hasta junio.
En negociaciones se encuentra la posibilidad que “Brizza”, una fragancia masculina exclusiva de Fuller Cosmetics y de la que el boricua es imagen, se distribuya en la Isla.
Una buena raja de aguacate, arroz con habichuelas y coquito, son los gustitos que sólo puede saciar aquí.
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